La mayoría de nosotros tenemos una mentalidad -porque así nos han educado- en donde trabajamos para generar recursos y con ellos comprar todo cuanto se nos antoje, “claro para eso trabajo”, cuando en realidad no tenemos un esquema que nos lleve a la planeación financiera, sino el paradigma de “Trabajar para generar los recursos que requiero, si me sobra ahorraré algo, claro… si no se me cruza una tentación antes.”
Los pobres
Cuando llega nuestro sueldo se gasta a diestra y siniestra, sin ningún control o presupuesto. La mayoría de nosotros realizamos compras impulsivas, vemos cuanta cosa en el aparador de la tienda y no meditamos si efectivamente este artículo es necesario en este momento.
De esa forma comenzamos la quincena y al final de ella vemos que lejos de tener algo para ahorrar, tenemos que acudir al crédito de la tarjeta para sobrevivir de la mejor manera, esperando con ansia la llegada de la nueva quincena; ciclo que se repite una y otra vez llevándonos a la catástrofe financiera.
Los ricos
Por otra parte se encuentran “los ricos”, que manejan un paradigma distinto, “Trabajo para generar recursos de los cuales siempre ahorraré un X%… este ahorro es intocable y el resto lo optimizo para lo que requiero.”
El rico hace un presupuesto de gastos, donde se incluye un rubro de ahorro que será siempre respetado, hace compras bien pensadas evaluando diferentes opciones, optimiza recursos, trata de utilizar correctamente sus créditos y no excederse en ellos.
De este modo el rico vive de forma decorosa, además de tener cierta cantidad de respaldo en caso de cualquier emergencia y más importante aún ¡con la conciencia libre de deudas!
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Si continúas actuando como rico y pensando como pobre, es un hecho que tus ingresos jamás te bastarán, incluso cuando logres aumentarlos. Esto por la simple y sencilla razón de que utilizas un esquema financiero -tal vez de manera inconsciente- en el que gastas más de lo que ganas.
Así el primer paso para salir del círculo vicioso es generar un esquema en donde pienses y actúes como rico. Un sistema con el que puedas optimizar tus finanzas personales destinando -de manera sistemática- un porcentaje de tu ingreso al ahorro mensual como si fuera cualquier otro gasto.
Evalúa tus ingresos en contra de tus gastos y te darás cuenta de que podrías llevar tus finanzas personales de manera más organizada y sobre todo eficiente. En la actualidad existen diferentes esquemas en el mercado que te ayudaran a generar este ahorro, que por supuesto te servirá ¡y agradecerás en un futuro!
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